El lunes pasado manejé 98 millas a través de la llanura para ir a la cita mensual con mi psiquiatra. Hay excelentes profesionales de salud mental en las 20 millas alrededor de mi casa, pero decidí no cambiar de doctor cuando me mudé a esta localidad, porque sabía que no me quedaría aquí por mucho tiempo. Ahora cuando tengo que mudarme otra vez no tengo alternativa. Buscar profesionales de salud mental debe estar al tope de la lista de cualquier familia afligida por una enfermedad mental y que deba trasladarse al otro lado del país.
He tenido suerte en relación a cuidados médicos. Disfruto de servicios de salud mental completos en un solo sitio con un profesional de primera. En los últimos años, he visto a este psiquiatra una vez al mes, en consultas de una hora, para monitorear la medicina que tomo y para psicoterapia. Antes y después de las consultas, uso cada minuto de mi largo viaje para disfrutar de la belleza austera de los Llanos y para reflexionar sobre cómo vivir mi mejor vida.
Por tal razón, el sólo pensar en mudarme incorpora más estrés a mi larga lista de cosas por hacer. Para encontrar cuidados de salud mental adecuados, debo seguir un plan detallado.
Primero debo contactar al Programa de Asistencia al Empleado (EAP en inglés) de la compañía para la cual trabaja mi esposo. EAP me entregará una lista de posibles proveedores. Entonces debo llamar por la lista para averiguar qué tipo de servicios ofrecen ellos. Luego, debo reducir la lista a dos o tres nombres, y hacer citas preliminares. Sería conveniente usar algo de mi tiempo para buscar casa / trabajo y visitar a los médicos seleccionados, para asegurarme que me siento cómoda hablando con ellos. Después de tomar una decisión, puedo pedirle a mi médico actual que escriba una carta al futuro profesional. Finalmente, debo asegurar la transferencia de mi historia médica.
Estos pasos podrían resultar en cuidados de salud mental excelente después de mudarnos a la nueva localidad. Sin embargo, siempre quedará de mi parte en hacer que funcione a su máximo potencial. Siempre debo encontrar tiempo para estar a solas y reflexionar en como vivir mi mejor vida, dondequiera que vaya.
Last Monday, I drove 98 miles across the Plains for the monthly appointment with my psychiatrist. There are excellent mental health professionals within 20 miles of my home, but I decided not to change doctors when I moved to this location, because I knew it was going to be temporary. Now that I am moving again, I don’t have a choice. Shopping for a mental health professional should be at the top of the to-do list of any family afflicted with mental illness and relocating across the country.
I have been lucky in terms of medical care. I enjoy one-stop comprehensive mental health services with an outstanding professional. In the last few years, I have seen this psychiatrist in monthly hour-long visits for monitoring of medication and psychotherapy. Before and after the appointments, I use every minute of my long drive to enjoy the austere beauty of the Plains and reflect on how to live my best life.
For that reason, thinking about moving away brings stress to my already overwhelming moving to-do list. In order to find adequate mental health care, I should follow a careful plan.
First, I must contact Employee Assistance Program (EAP) of the company for which my husband works. EAP will provide a list of possible providers. Then I must call those on the list to inquire about the kind of services they offer. Next, I must narrow down the list to two or three doctors, and set up preliminary appointments. I should also use some time from my house hunting / job searching trip to visit the doctors selected and make sure I am comfortable talking to them. After making a decision, I may ask my current doctor to write a letter to the future provider. Finally, I must arrange for the transfer of my medical history.
These steps may result in excellent mental health care after transferring to the new location. It will always be on my part, though, to make it work to its full potential. I must always find that time alone to think about how to live my best life, anywhere we go.